Cerrando un ciclo, abriendo miles


Los días de clase se van terminando, las pruebas empiezan a dar los últimos pronósticos, el calor se hace sentir en el aula, los profesores muestran síntomas de cansancio, los alumnos están con pocas pilas, el colegio se empieza a vaciar y todos los recuerdos, nostalgias, actividades, peleas, reconciliaciones, amores y experiencias aprendidas cobran vida a modo de un pasado único; de una etapa que, como todas las de la vida, nunca se vuelve a repetir.

Memorias que corresponden a compañeros de curso con los que hemos compartido horas de clase y que hoy no están, compañeros que el próximo año no seguirán en el colegio, compañeros que estarán en el colegio pero en otro curso, profesores que nos seguirán viendo pero desde afuera del aula y otras situaciones más que nos han marcado como alumnos y profesores, como compinches, amigos o compañeros... todas relaciones de la cual uno aprende constantemente y de las cuales se nutre como persona.

Como todo en la vida pasa, siempre hay aspectos que quedan y sirven para sostener esos buenos momentos y relaciones creadas: el correo electrónico para mandarle un mensaje para ver cómo anda, el teléfono para escribirle un "texto" o llamarlo pasa su cumple, la dirección de la casa para pasar a tomar unos mates o el "face" para arreglar una comida o salida.

De este año cada uno puede decir lo que le gustó o no, pero lo importante es poder reconocer que todo lo que ha hecho le ha servido para crecer como persona, como compañero, como alumno, como docente, como amigo.

Por eso les agradezco por tanta paciencia, esfuerzo y por luchar por que ese vínculo tan importante que pudimos construir "no se corte nunca".

Saludos eternos de una experiencia vivida, compartida, editada y publicada en la web 2.0.

Juan.

A mis alumnos...


Antes que nada quiero que cuando empiecen a leer este post hagan dos cosas: primero que lo lean completo, y segundo que reflexionen al respecto. Para los que no acostumbran a leer mucho les dejo un gran abrazo en estas primeras líneas por si no llegan al saludo final.

"La red todo lo puede" es una de las tantas frases que se escuchan a diario en este nuevo escenario virtual. Por eso, a pesar de mi ausencia física frente al curso, el aprendizaje, el diálogo, la puesta en común, el compartir información y el sentirnos cerca dejan de ser posibles para transformarse en hechos que a través de estos nuevos medios hacemos realidad.

Lo educativo tiene que ser un disparador que, guiado por el vínculo docente - alumno, transforme esa situación inicial en un proceso de aprendizaje de límites desconocidos. En este contexto propongo que lo que juntos hemos construido y que tanto esfuerzo nos consumió lo sigamos edificando juntos de la mano del nuevo docente.

Hoy más que nunca sabemos que el aprendizaje no está ligado únicamente a lo escolar. Uno aprende en el barrio, en la familia, en Internet, en el club, en las actividades que realizamos en el tiempo libre... en la vida. Lo importante es la pasión y el deseo que le dediquemos a ser cada día mejores vecinos, mejores alumnos, mejores compañeros, mejores hermanos, mejores... PERSONAS

Y en esto me detengo por un segundo (porque se que si sigo mucho se cansan de leer). En primer lugar les doy las gracias por demostrar ese espíritu combativo y desafiante por descubrir algo distinto, un aprendizaje 2.0 por llamarlo de una manera. Por asumir el desafío de tener clases todos los días de la semana, las 24 horas del día. Por cumplir con el desafío de publicar y de construir su espacio de reflexión y comunicación en la red. Por dejarme llegar, conocer sus gustos y tratar de construir juntos escenarios agradables de enseñanza - aprendizaje.

Simplemente gracias a ustedes por ser mis alumnos, por entender mis días de enojos, por aceptarme con mis puntos débiles y fuertes y por animarse a lo diferente; porque sin ustedes los docentes no tendríamos esa gran responsabilidad de formar.

Mi presencia y apoyo hacia ustedes no se reduce al aula, saben dónde encontrarme si necesitan una mano, o dos.

Los quiere: "El profe"

PD: Mi rodilla anda bien, gracias por los saludos.

Su comentario no molesta, construye.